1.- Circula un chiste que dice: Dos amigos se encuentran en la calle. Uno está dando palmas y el otro le pregunta:
-¿Para qué estás dando palmas?
-Para ahuyentar a los elefantes.
-Pero si aquí no hay ningún elefante.
-¿Lo ves? Sirve.
2.-Dice en 2009 José Miguel Arroyo, Joselito, torero que se retiró en 2003: “El miedo no se va. (…) Jamás te acostumbras a la presencia de la muerte, a que esté tan cerca. Y el terror que provoca es adictivo, obsesivo. (…) ¿Volver? Está descartado. No voy a ensuciar el compromiso de irme. Soy más sabio, pero ya no tengo la bendita locura de otro tiempo”.
3.-Dice la escritora Carmen Laforet: “La respuesta que buscabas ya estaba dentro de ti pero tuviste miedo de recibirla. O no pudiste alcanzarla. A veces ocurre eso. Yo llevo ya tiempo observando mi vida y constatando cómo en tantas ocasiones el miedo me ha ocultado la verdadera respuesta. En esos casos uno se aferra a una verdad acomodaticia e incluso cree en ella con toda la sinceridad de que es capaz en ese momento. Y se va construyendo la vida sobre esa base inestable y falsa, e incluso puede funcionar durante un tiempo. Pero la verdad acaba imponiéndose”. (Cita tomada de Cristina Cerezales Laforet, Música blanca. Barcelona: Destino, 2009, 77-78)
4.-Otros miedos:
-Al abandono. A la fusión con el Otro. A desaparecer.
-A los deseos que subyacen en algunos miedos.
-Al odio. Al amor.
-A deseos propios.
-Al compromiso. A la propia responsabilidad.
-A la separación. A la unión.
-A tomar una decisión. A perder el “goce” de la indecisión.
-Al fracaso. Al logro de una meta.
-Al dolor. Al placer. A la satisfacción.
-Al miedo.
-A ser dañado. A dañar.
-A la agresividad ajena. A la propia.
-Al encuentro sexual.
-A vengarse. A recibir una venganza.
-A no dar la talla. A darla.
-A renunciar al “goce” malsano.
-A psicoanalizarse.
-A la pérdida. A la ganancia.
-A la angustia.
-Al infierno de repetir el mismo modo de sufrimiento.
-A la maternidad/paternidad.
-A descubrirse a uno mismo.